Fundación Camino construirá el primer bar en barrio Cabin 9. Será un espacio que brindará oportunidades de trabajo a las mujeres que pertenecen al Banquito Solidario: allí podrán ofrecer sus productos y servicios.
Hace ya 7 años un grupo de mujeres de un lado de la ciudad, la Rosario con servicios, familia y trabajo, nos organizamos desde Fundación Camino y empezamos a frecuentar otro barrio, Cabin 9 en Pérez; allí donde funciona el Centro CONIN Rosario 2 de la Fundación. Cerquita y, a veces, tan lejos que ni el colectivo llega. Así conocimos otro grupo de mujeres, de otro lado de la ciudad, sin servicios, con familia y casi todas sin trabajo.
Lo que nos convocó fue la idea de prestar pequeños créditos para solventar sus emprendimientos, pequeños algunos, otros difíciles de sostener, otros llenos de expectativas. Pero casi todos devinieron en algo que ninguna esperaba: el empoderamiento de todas, la convicción de que nos podemos arreglar, sustentar, sostener entre nosotras y dar el ejemplo a nuestros hijos. El convencimiento de que, de ambos lados de la ciudad, es posible ser independientes, crecer, aprender, tener un espacio de escucha y ayudar a otras. Así nació el Banquito Solidario de Cabin 9, un proyecto que se convirtió en algo mucho más trascendente que prestar y recibir dinero.
Hoy vamos por más, vamos por un plan superador; sabemos cómo arrancar y sostener un emprendimiento. Ahora buscamos, a través del trabajo en conjunto, un espacio propio para que nuestro trabajo pueda crecer, compartir y multiplicar las posibilidades para todas. Así nace la idea de una cooperativa, desde aprender de qué se trata hasta meses de reuniones y lluvia de ideas para organizarnos, crear un estatuto y buscar, tímidamente, ese espacio que llegó porque este grupo de mujeres lo necesitaba y lo merece. El Concejo Deliberante de Pérez, por decisión unánime, cedió a Fundación Camino en comodato por 20 años (con opción a 10 más) un terreno en un lugar estratégico y, allí, vamos a construir el primer bar de Cabin 9. “BANKYBAR” seco, sin alcohol y sin producción in situ, pero con el espíritu de encuentro que siempre nos caracterizó. Un espacio que brinde oportunidades de trabajo a las mujeres que pertenecen al Banquito, que ofrezca la posibilidad de mostrar y vender sus productos y servicios, de convocar a otras personas del barrio a que lo hagan y así, desde ese lugar, INCLUIR , PARTICIPAR Y AUTOGESTIONARSE PARA CRECER Y HACER CRECER AL BARRIO. Un lugar para que todos se aventuren, se den la mano como grupo y se potencien juntos, porque creemos que se aprende en equipo pensando en y con el otro.